La verdad que nadie te contó sobre no dormir bien

Durante mucho tiempo, se pensó que mientras dormíamos el cerebro y nuestros sistemas también lo hacían. A finales del siglo XIX el psicólogo alemán Hermann Ebbinghaus introdujo la teoría que explicaba, cómo durante el sueño las neuronas tenían una importante actividad. Un siglo más tarde, en los años 50, dos investigadores de la Universidad de Chicago, Eugene Aserinsky y Nathaniel Klietman, comprobaron esa teoría y demostraron que el cerebro tenía gran actividad mientras el cuerpo estaba en reposo.

Dormir, es fundamental para generar y consolidar el aprendizaje, mientras dormimos el cerebro recoge la información y la clasifica de acuerdo con su relevancia, la almacena en el hipocampo como memoria temporal y la fija para ser procesada cuando sea necesario... El tiempo sugerido para dormir es entre 7 y 8 horas y media, tiempo suficiente para que el ciclo de descanso y de la fijación del aprendizaje se lleve a cabo.

En las etapas de sueño REM (Rapid Eye Movement) se producen beneficios necesarios para nuestra salud y recuperación.

Dormir menos horas que las recomendadas, tiene tremendos impactos en nuestra salud, desde perder concentración, volvernos impacientes y menos eficientes, hasta afectar de manera importante nuestros sistemas vitales:

  • Altos niveles de insulina
  • Aumento de peso. Se sube el nivel de la hormona Ghrelina que causa hambre y reduce el apetito. Come más azucares y carbohidratos.
  • Depresión, mal humor
  • Déficit transitorio de atención.
  • Problemas de aprendizaje y memoria.
  • Se sube el cortisol, hormona del estrés, y mata las células cerebrales del hipocampo, donde se centraliza la memoria y el estado de ánimo. Cuando la mente aprende datos, el hipocampo modifica la actividad neuronal y ese patrón se reproduce mientras dormimos para fijar información. Menos REM menos recuerdos
  • Se afecta la memoria de largo plazo
  • Se afecta el lóbulo parietal y el córtex prefrontal creando memorias falsas.
  • Se afecta el lóbulo temporal asociado al procesamiento del lenguaje.
  • Igualmente se afecta el pensamiento divergente haciendo a la gente menos ingeniosa y original.

De otro lado, un adecuado ciclo de sueño favorece nuestra salud, en especial:

  • Sistema Cardiovascular: Durante el sueño se regeneran tejidos, se regula el funcionamiento del corazón. Al estar en posición horizontal se facilita la llegada de sangre al corazón.
  • Sistema Endocrino: Favorece la eliminación de toxinas, la regeneración celular y la regulación hormonal, incluyendo la generación de la hormona del crecimiento.
  • Sistema Nervioso: Durante el sueño se agrupan los recuerdos y se ordenan nuestros pensamientos e ideas, esto con el fin de mejorar la memorización de los conceptos aprendidos en el día. Así mismo dejamos libres ciertas emociones y pensamientos que tuvimos cuando estábamos alerta, por un motivo u otro. Esto hace que nuestro nivel de estrés baje considerablemente y que al despertar estemos más preparados para afrontar un nuevo día.
  • Sistema Inmune: Durante el sueño se reparan nuestras defensas, regenerándose nuestros anticuerpos y haciéndonos más resistentes a posibles enfermedades
  • Sistema respiratorio: Durante el sueño nuestra respiración se hace más lenta y efectiva, mejorando la oxigenación de tejidos y células.
  • Sistema musculoesquelético: la relajación de nuestros músculos durante el sueño unido a la liberación de hormonas y a una mejor síntesis proteica favorecen una mejor regeneración muscular, reparando el “daño” causado durante el entrenamiento y preparando nuestra musculatura para el próximo estímulo.

Es más fácil que mueras por no dormir que por hambre. Se necesitan dos semanas para morir de hambre y tan solo diez días para morir por falta de sueño.

Related aticles

El descanso herramienta para mejorar tu salud - Colchones Paraiso
29
Aug
 Mejorar tus hábitos de sueño no solo refleja un mayor descanso, también favorece el control del peso, tu apariencia física y además al descansar bien, el sistema circulatorio trabaja menos porque la presión arterial ha disminuido y se necesita menos esfuerzo para bombear la sangre, esto protege tu corazón. Cuando dormimos, nuestro cuerpo se relaja y produce hormonas que contrarrestan los efectos del estrés y colaboran, entre otras cosas, a que nos encontremos más felices y mucho más saludables.
Custom HTML